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Es por eso que existe: para ayudarte a vivir tus pasiones.

Esperamos que te haya gustado este post y que empieces a poner en marcha nuestros consejos para ser un emprendedor digital aún más exitoso.

Ser un emprendedor es el sueño de muchos jóvenes hoy en día.

La idea de ser tu propio jefe, de colocar tus propias reglas, de tener flexibilidad en la toma de decisiones, de aventurarte con ideas que pocas empresas establecidas se atreverían a siquiera considerar y trabajar para construir algo propio es, sin duda alguna, atractiva para la mayor parte de las personas.

Muchas veces, aunque un joven emprendedor no cometa errores en términos de la disciplina, constancia, educarse e invertir largas horas de trabajo en el desarrollo de su empresa, muchas veces encontrarán que inversionistas, compañeros, empleados, posibles socios e inclusive proveedores y clientes, dudarán de hacer negocios con alguien que podría ser inmaduro, irresponsable, alocado o inclusive algo incapaz.

Haz lo que has prometido que harás Parece algo lógico, pero debemos recordar que cada compromiso adquirido debe ser cumplido.

Desde no cumplir las fechas para una entrega, pasando por olvidar hacer un pago a un proveedor, hasta simplemente no ir a una reunión pautada cuentan, por más que el desvío sea de pocas horas o haya sido un error involuntario.

Cuida los detalles y trata de mantener tu ambición –aunque alta- bien controlada.

No querrás terminar fallándole a alguien y contribuyendo a que quienes tengan dudas de ti refuercen el estereotipo.

Asociate con quienes tengan credibilidad Esfuérzate por crear una red de contactos que tengan credibilidad.

Busca asociarte con alguien con alguna experiencia, traer a tu equipo de trabajo a gente experimentada o inclusive utilizar cualquier contacto de amigos que puedan hablar bien de ti ante otros.

No se trata de crear un tráfico de influencias en el mal sentido de la expresión, se trata de rodearte de gente que refuerce la idea de que estás haciendo negocios en serio y que no es un hobbie glorificado del que te fastidiarás un día.

El viejo dicho “dime con quién andas y te diré quien eres” puede que tenga más vigencia de lo que piensas en cuanto a negocios se trata.

Ante todo, demuestra humildad Aun cuando debes evitar que te desestimen sólo por tu edad, debes aceptar el hecho de que hay cosas que no conoces por tu falta de experiencia.

Tener la humildad de solicitar ayuda de los más experimentados cuando hay algo que desconoces o pedir consejos a los demás no sólo te ayudará a acortar la curva de aprendizaje sino que evitará que cometas errores que puedan ser percibidos como producto de la soberbia.

Esto no implica que debas descuidar tu trabajo de estudio e investigación para tratar de construir tu marca de forma acelerada, se trata de apalancarte en otros para hacerlo de forma eficiente en los casos que sea necesario.

Se siempre objetivo A menos que estés construyendo tu marca en una plataforma que se base en lo subjetivo, lo mejor es tomar posiciones objetivas sobre asuntos de negocios y no quedar atrapados en la predicación.

Es especialmente importante eliminar temas de discusión que no pertenecen al negocio y no están directamente relacionados con el cumplimiento de tus metas.Tu prioridad es concentrar tu energía y recursos en sólo aquellas tareas y activos que te ayudan a alcanzar tus metas.

Da a conocer tus logros Ahora no es el momento de ser tímido.

En primer lugar, aprende a reconocer los logros en tu negocio y en tu carrera.

Incluso los logros pequeños pueden ser reconocidos si pueden estar directamente relacionados con la construcción de tu credibilidad.

Lo siguiente, es aprender a poner tus logros al frente y en el centro para que todos puedan ver.

Compártelos con las partes interesadas, súbelos a tu sitio web y promuévelos en tu perfil de LinkedIn.

Esperamos que estos simples consejos te ayuden a que tu edad no se convierta sino en una virtud.

Después de todo, Zuckerberg, Gates y Jobs iniciaron sus muy exitosas compañías a edades muy tempranas, y algunos de ellos sin siquiera culminar sus estudios universitarios.

Consejos para ganar la confianza de directivos y clientes Aunque ya sientas que tu discurso de ventas esté bien afinado, deberás hacer algunos cambios en tus estrategias hasta ahora para resonar en los líderes sénior de una organización: Documéntate Para venderle a un directivo, no debes únicamente ofrecer algo que cubra alguna necesidad, sino dar con algo con un valor agregado.

La única forma de dar con ese valor es investigando.

Entendiendo el mercado de tu cliente, su competencia, los retos de la industria y las novedades de su sector.

Los proveedores que al final terminan llamándose aliados son los que se anticipan a las necesidades de sus clientes, y la única forma de lograr esta posición es comprendiendo muy bien el entorno que rodea a tu cliente.